El papa Francisco presidió este viernes la misa en la catedral San José de Bucarest, donde animó a la minoría católica a tomar el ejemplo de la Virgen María y a no tener miedo de ser los portadores de "la bendicioen que Rumania necesita". También los exhortó a ser "promotores de una cultura del encuentro que desmienta la indiferencia y la divisioen y permita a esta tierra cantar con fuerza las misericordias del Senñor".
En el marco de su viaje apostólico a Rumania, el papa Francisco visitó este viernes la catedral nueva ortodoxa de Bucarest, donde rezó el Padrenuestro junto con el Patriarca Daniel. Ante el clero ortodoxo, el pontífice recordó que en la oración al Señor "está contenida nuestra identidad de hijos y, hoy de manera particular, de hermanos que rezan uno al lado del otro".
El papa Francisco se reunió este viernes con el Patriarca Daniel y los obispos del Santo Sínodo de la Iglesia Ortodoxa de Rumania, donde aseguró que "necesitamos escuchar juntos al Señor" y destacó que el viaje que San Juan Pablo II realizó hace 20 años a este país "contribuyó no sólo al resurgir de las relaciones entre ortodoxos y católicos, sino también al diálogo entre católicos y ortodoxos en general".
El papa Francisco llegó a Rumania para una visita apostólica de tres días en clave ecuménica, donde en su primer discurso ante las autoridades aseguró que "la Iglesia Católica no es extranjera, sino que participa plenamente en el espíritu nacional rumano" y rindió su homenaje a los sacrificios de tantos hijos e hijas de este país que "enriquecen con su cultura, su idiosincrasia y su trabajo los países donde emigraron".