"Más de 3.300 millones de personas viven en países donde los gobiernos gastan más en pagar a los acreedores que en servicios públicos básicos", advirtió la organización caritativa.
El secretario del Vaticano para las Relaciones con los Estados llamó, en la ciudad suiza de Ginebra, a trabajar para la reducción y condonación de las deudas de los países en desarrollo.
Francisco hizo este llamamiento a los países de "tradición cristiana" para celebrar el Jubileo 2025 y que "ninguna familia, ningún pueblo sea excluido".
La organización caritativa de la Iglesia promueve esa petición en favor de los países más pobres, inspirada en el folleto de proclamación del Año Santo.