El delegado de la Comisión Episcopal para las Causas de los Santos destacó la espiritualidad del futuro beato argentino, a quien definió como "un hombre de Dios, un hombre mariano".
Fue en una misa presidida por el administrador diocesano, Pbro Luis Albóniga. Predicó la homilía el P. Pablo Etchepareborda, quien definió al cardenal como "un profeta de esperanza".
El obispo Gabriel Mestre bendijo la reimposición del nombre que Obras Sanitarias le dio a la Plaza del Agua para recordar el legado del segundo obispo de Mar del Plata.