En un videomensaje, el arzobispo de Buenos Aires anima a preparar entre todos una mesa donde nadie quede afuera, "para que también renazcan entre nosotros el amor, la justicia y la paz".
En su discurso, volvió a recordar la guerra en Tierra Santa, y recordó que Israel no dejó entrar al patriarca en Gaza y volvió a bombardear lugares donde había niños. "Esto es crueldad", afirmó.
Un auto atropelló a una multitud, mató a cinco personas e hirió a más de 60. La catedral de esa ciudad alemana permanecerá abierta todo el día, como lugar de oración y atención pastoral.
En su habitual saludo navideño, Francisco describió su servicio como valioso para la difusión del Reino de Dios en todo el mundo.