Francisco hablo de los alcances de la declaración Fiducia Supplicans con miembros del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, cuyo prefecto es el cardenal argentino Víctor Fernández.
El pontífice presidió las vísperas ecuménicas para cerrar la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos. Llamó a evitar la división a través del servicio desinteresado y la oración.
Francisco les pidió menos rigorismo y prejuicios a los auditores del Tribunal de la Rota Romana. Recordó también que la reforma pretende favorecer los juicios rápidos y no la nulidad de las uniones.
El Papa rezó por la paz en Medio Oriente y Ucrania, condenando los bombardeos contra civiles, y recordó a las víctimas del Holocausto, afirmando que "el odio y la violencia nunca pueden justificarse".