El arzobispo de Córdoba llamó a "estar atentos a las necesidades de los demás, a vencer la tentación de cuidarse a sí mismo y a animarse, desde la misericordia, a mirar más allá".
"Que volvamos a soñar que el reino de Dios es posible, que volvamos a creer que Jesús resucitado camina a nuestro lado, que volvamos a apostar por el Evangelio", propuso el arzobispo porteño.
En su reflexión semanal, el presidente del Episcopado animó a hacerlo dando "testimonio de la misericordia con que el Señor nos ha amado y nos ha perdonado".
El arzobispo sanjuanino propuso hablar con los amigos más cercanos de las heridas que "habitualmente escuchamos y recibimos".