Nació en Londres en 1175. Muy joven participó en las cruzadas con su padre en el ejército de Ricardo Corazón de León y después se alistó en los ejércitos de España que luchaban contra los moros. Finalmente con el bordón de peregrino recorrió Egipto, Siria, Italia, Alemania y Francia, y cambió la cota de malla por el hábito de la Merced. Así acompañó a Jaime I el Conquistador en la expedición de Mallorca y se embarcó para Inglaterra a recoger limosnas para redimir cautivos. En Argel le faltó dinero para un cautivo a punto de perder la fe, y se quedó en su lugar. Antes de ser rescatado, en 1240, murió crucificado por los moros. En 1743 fue inscripto en el catálogo de los santos. San Serapio es el patrono de la ciudad bonaerense de Azul.