Vaticano: La Comisión para la Protección de Menores prepara un Informe Anual Piloto

En el marco de su Asamblea Plenaria la Comisión Pontificia revisó el Marco de las Directrices Universales y evaluó fortalecer los vínculos con el Dicasterio para la Doctrina de la Fe.

La Comisión Pontificia para la Protección de los Menores celebró su Asamblea Plenaria en Roma del 7 al 11 de octubre. En un comunicado publicado el viernes, la Comisión dijo que la reunión reunió a 30 miembros expertos de los cinco continentes para discutir la dirección estratégica de la Comisión bajo el liderazgo del recién nombrado secretario, monseñor Luis Manuel Ali Herrera, y la secretaria adjunta, Teresa Kettelkamp.

El cardenal Seán Patrick O'Malley, OFM Cap., presidente de la Comisión, celebró la misa de apertura de la Asamblea.

"Aquellos que sufren tienen un derecho particular a nuestro amor", dijo en su homilía. "La Comisión tiene la oportunidad y la obligación de hacer de la Iglesia una Iglesia más samaritana".

Colaboración con DDF
La declaración explicó que las sesiones de trabajo giraron en torno a tres áreas clave de importancia estratégica: mejorar la capacidad local de protección, revisar el Marco de Directrices Universales y prepararse para la publicación del Informe Anual Piloto sobre Políticas y Procedimientos de Protección en la Iglesia Católica.

En una sesión conjunta participaron el arzobispo John Kennedy, secretario de la Sección Disciplinaria del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, el padre Robert Geisinger, SJ, y el padre Brian Taylor del Dicasterio.

En esta reunión se analizaron los procedimientos vigentes para abordar el abuso sexual y se continuó con el desarrollo de directrices de protección. La colaboración entre la Comisión y el Dicasterio se consideró una expresión de unidad en su misión de prevenir el abuso.

La Asamblea dedicó considerable atención al próximo Informe Anual Piloto, un proyecto solicitado por el Papa Francisco en 2022. Con el objetivo de evaluar la eficacia de las políticas de protección actuales y ofrecer recomendaciones para mejorarlas, la declaración dice que se espera que sirva como base para un cambio sostenible en las prácticas de protección de la Iglesia.

Los miembros también revisaron el plan, Instrumentum Laboris, para el informe 2024/2025, que promete ser un mecanismo importante para promover la rendición de cuentas y la transparencia.

Marco de Directrices Universales y alcance global
La Comisión continuó desarrollando su Marco de Directrices Universales durante la Asamblea, incorporando los comentarios de las iglesias locales.

La fase piloto, que actualmente se está probando en Costa Rica, Zimbabwe, Polonia y Tonga, servirá de base para el marco de salvaguardia consolidado, uno de los principales objetivos a largo plazo de la Comisión.

Durante los últimos seis meses, la Comisión se ha reunido con 13 conferencias episcopales nacionales durante sus visitas ad limina a Roma.

La declaración señaló que estas reuniones brindaron oportunidades para evaluar los esfuerzos locales de protección y abordar las brechas de recursos en las diócesis vulnerables y que el diálogo en curso tiene como objetivo garantizar que las iglesias locales en todo el mundo tengan las herramientas y los recursos necesarios para protegerse contra el abuso y brindar atención a las víctimas.

La "Iniciativa Memorare" y el fortalecimiento de capacidades
La Asamblea también evaluó el progreso de la Iniciativa Memorare, un programa diseñado para ayudar a las iglesias locales a desarrollar capacidades de protección alineadas con Vos estis lux mundi.

La iniciativa está activa en América Latina, África y Asia, y actualmente otras 12 iglesias locales están en proceso de implementarla. El programa se centra en establecer estructuras para gestionar las denuncias de forma transparente y brindar apoyo profesional a las personas afectadas por el abuso.

Cooperación institucional
Durante los meses de verano, la Comisión mantuvo importantes reuniones con diversos socios de la Curia Romana, entre ellos el Dicasterio para el Clero, el Dicasterio para los Obispos y el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida. Estos debates se centraron en fomentar la cooperación institucional necesaria para la protección eficaz de las personas vulnerables dentro de la Iglesia.

Esperanza y solidaridad
Reflexionando sobre los logros de la Asamblea, el cardenal O'Malley dijo: "La Comisión ha asegurado que la protección sea y siempre será una presencia en la vida de la Iglesia. Si bien no se han logrado todos nuestros objetivos, seguiremos presionando para que se realicen reformas allí donde identifiquemos fallas sistémicas. Nuestros esfuerzos han marcado una diferencia significativa y quizás lo más importante es que son un signo de esperanza y solidaridad para quienes han sufrido abusos y para sus seres queridos".+