Religiosos y laicos participaron de un retiro en Junín de los Andes

Organizado por la Inspectoría Salesiana de Argentina Sur, los asistentes reflexionaron y profundizaron, durante una semana, sobre el misterio de la presencia de Dios en la vida de cada persona.

Religiosos y laicos participaron de los Ejercicios Espirituales de la Inspectoría Salesiana de Argentina Sur, que se desarrollaron del 21 al 26 de octubre en la casa salesiana de Junín de los Andes, en la provincia de Neuquén.

Con el lema "Que se enciendan tus fuegos en la vida, que tus 'zarzas' nos salgan al encuentro, y que brille la luz de tu misterio en los signos que habitan tantos sueños", durante la semana, de forma comunitaria, salesianos consagrados y laicos referentes en la gestión y en la animación de las casas salesianas del territorio de Argentina Sur, reflexionaron y profundizaron sobre el misterio de la presencia de Dios en la vida de cada persona.

"Fue una experiencia hermosa, desafiante y muy gratificante. La experiencia de comunidad y de compartir, entre hermanos y hermanas, es valiosa y ayuda, porque es de mucho sostén", manifestó Belén Gorrochategui, pastoralista de la casa salesiana Juan Segundo Fernández, de San Isidro.

Por su parte, el Padre Marcelo Madueña, de la casa salesiana Sagrado Corazón, de La Plata, aseguró: "Hemos pasado unos días muy lindos, en los que hemos compartido conversaciones que han llegado al corazón y han llegado al alma, donde cada uno pudo expresarse con mucha libertad. Creo que todos nos vamos con más fuego en el corazón que con el que vinimos".

En tanto, el Padre Gaspar Martínez Morán, de la casa salesiana San José Obrero, de la localidad de Zárate, sostuvo: "Muchas gracias por estos días de retiro, un espacio de encuentro mutuo entre nosotros, espacio para cargar las pilas, para reencender nuestros fuegos, junto con otros que trabajan en la misma misión, misión que compartimos. Poder tener estos espacios para compartir nos permite volver a la cotidianidad de nuestro día a día con más fuerzas para seguir", 

"Para todos nosotros fue una gran experiencia de vida comunitaria, en los que Dios se manifestó con todo su amor, con toda su ternura y con todo su aliento", reflexionó María Margarita Figueroa, directora general de la casa salesiana Nuestra Señora de Luján, de General Pico, La Pampa.

Finalmente, Normando Ashaghi, director general de la casa salesiana Nuestra Señora de la Merced, de Ensenada, puntualizó: "Compartir la vida y verla crecer entre religiosos y laicos fue una experiencia de familia muy linda, y, sobre todo, cuidar la vida, cuidar la salud y cuidar los vínculos, que sean cada vez más humanos y más humanizados".+