Recuerdan a Mons. Mühn, primer obispo de Jujuy
- 15 de julio, 2016
- San Salvador de Jujuy
Al cumplirse los 50 años del fallecimiento de monseñor Enrique Mühn, el domingo 17 de julio, a las 10, el obispo diocesano de Jujuy, monseñor César Daniel Fernández, presidirá una santa misa en la catedral del Santísimo Salvador, en la que se recordará al primer obispo de esta sede episcopal del norte argentino.
La diócesis de Jujuy fue creada el 20 de abril de 1934, por la bula "Nobilis Argentinae nationis", de Pío XI. Comprende, en la provincia de Jujuy, los departamentos de Dr. Manuel Belgrano, El Carmen, Libertador General San Martín, Palpalá, San Antonio, San Pedro, Santa Bárbara, Tilcara, Tumbaya y Valle Grande.
Su primer obispo fue monseñor Enrique Mühn, de la Congregación del Verbo Divino, designado por Pío XI el 13 de setiembre de 1934. Fue consagrado el 17 de febrero de 1935 y tomó posesión de la sede episcopal jujeña el 11 de marzo de 1935. El 9 de agosto de 1965 presentó la renuncia por razones de salud. Falleció el 18 de julio de 1966.
Datos biográficos
Enrique José Mühn nació en San Jerónimo Norte (Santa Fe) el 20 de febrero de 1897 en una familia de inmigrantes suizos.
Realizó sus estudios de Filosofía y Teología en el Colegio Apostólico de Villa Calzada (hoy Rafael Calzada), provincia de Buenos Aires, de la congregación del Verbo Divino, a cuya congregación se incorporó y en la que fue ordenado sacerdote el 20 de septiembre de 1930,
Realizó también estudios superiores, alcanzando los doctorados en teología y filosofía.
Solo cinco años después y pocos días antes de cumplir los 38 años, fue consagrado obispo en la catedral de Buenos Aires, actuando como consagrantes monseñor Fermín E. Lafitte, arzobispo de Córdoba, y monseñor Nicolás Fasolino, arzobispo de Santa Fe (hoy Santa Fe de la Vera Cruz).
Un mes después, el 11 de marzo de 1935, tomó posesión como primer obispo de la recientemente creada diócesis de Jujuy.
En 1938 invitó al teólogo y biblista alemán Juan Straubinger, exiliado del régimen nazi, a radicarse en Jujuy, donde éste editó una revista bíblica antes de mudarse a La Plata, donde editó su propia traducción comentada de la Biblia en castellano.
Participó activamente en el Concilio Vaticano II, defendiendo la misa en lengua vulgar y la celebración comunitaria de los sacramentos. También tuvo participación en el movimiento que llevaría a la creación de la Universidad Católica Argentina.
Trató por todos los medios de extender la vida espiritual hacia todos los rincones de la diócesis, intensificó la devoción mariana restaurando el culto a la Santísima Virgen del Rosario de Río Blanco, tradicional en el siglo XVII, levantó el nivel cultural creando la biblioteca del obispado y la Asociación Cultural Católica, que llegó a ser la más importante del norte argentino. La erección de capillas en la campaña, la organización de las parroquias y la instalación de colegios religiosos comprendían su preocupación apostólica, coronada actualmente por el edificio del Seminario Diocesano.
El 9 de agosto de 1965 presentó la renuncia por razones de salud y falleció en Jujuy el 18 de julio de 1966.
Sus restos descansan en el camarín de la Virgen del Rosario de Río Blanco donde esperan la resurrección final.+