Martes 30 de abril de 2024

Mons. Zurbriggen destacó la 'presencia cercana y transformadora de María'

  • 26 de septiembre, 2023
  • Concordia (Entre Ríos) (AICA)
El obispo de Concordia presidió la misa central de la Virgen de la Merced, patrona de la diócesis, y resaltó las "actitudes y cualidades" de la Madre de Jesús.
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La comunidad de la parroquia Nuestra Madre de la Merced de la ciudad de Concordia celebró su fiesta patronal el sábado 23 y domingo 24 de septiembre.

Este año, el lema que acompañó los festejos fue “Maria, tu corazón late en la comunidad” y durante el mes se rezó una Novena en honor a esa advocación mariana y se celebraron misas, animadas por las distintas áreas pastorales.

El sábado 23 se realizó una kermese que congregó a un grupo numeroso de niños y adolescentes que luego salieron en procesión con la imagen de la patrona por las calles del barrio.

Por la tarde, el obispo local, monseñor Gustavo Zurbriggen, celebró la misa junto con el párroco, presbítero Nicolás Frigo.

En su primera visita que el prelado realizó a esa comunidad parroquial desde que tomó posesión de la diócesis, monseñor Zurbriggen manifestó la alegría de celebrar a la Virgen de la Merced, sintiéndose en comunión con su anterior destino episcopal, dado que esta advocación es también la patrona de la prelatura de Deán Funes.

En la homilía, el obispo hizo hincapié en las actitudes y cualidades de María, y destacó además su “presencia cercana, significativa y trasformadora en los momentos claves de la historia de salvación”. 

Luego de la Eucaristía, la comunidad compartió una cena de la cual también participó monseñor Zurbriggen. A la medianoche y aguardando la llegada de la festividad, los fieles se congregaron nuevamente en el templo para rezar un rosario luminoso. 

Por su parte, el domingo 24 por la mañana, las personas que trabajan en los centros pastorales San Antonio y San Agustín y en los centros celebrativos Nuestra Señora del Luján, Nuestra Señora del Valle y San Cayetano, realizaron una procesión por las calles de la jurisdicción parroquial como gesto visible de que es María quien camina en medio de su pueblo, en el interior de los barrios, acompañando a cada familia.

Seguidamente, el presbítero Frigo presidió la celebración eucarística y reflexionó sobre la “presencia y permanencia de María entre nosotros, desde el momento en que Jesús se entrega por amor en la cruz y pide al discípulo que la reciba en su casa”. 

Desde aquel momento de la cruz, sostuvo el sacerdote, “comenzó la hora, comenzó el tiempo de la salvación, de nuestra redención. No es mañana ni dentro de un tiempo, ni fue en un pasado y yo me la perdí. No, es hoy, es ahora, este es el tiempo de Dios en nuestra vida”.

Al momento de referirse a la casa propiamente, el párroco explicó que “todos estamos invitados a recibir a María en la casa de mi propia interioridad, de mi corazón, del núcleo íntimo y sagrado donde tomo mis decisiones y ejerzo mi libertad, aunque muchas veces está con cadenas y ataduras”. “Pidámosle a ella que nos ayude a liberarlo (al corazón) de las situaciones que lo oprimen”, agregó

Finalmente, el sacerdote reflexionó acerca de la necesidad de recibir a María en la casa que es la comunidad, la parroquia, que quiere convertirse en “un lugar seguro, lugar donde encontrar cobijo, donde Dios me da hermanos, donde la Madre me abraza, donde Jesús me consuela y donde sano las heridas de tantas andanzas”.+