Mons. Oscar Ojea le habló a los periodistas
- 5 de junio, 2015
- San Isidro (Buenos Aires) (AICA)
Con motivo del Día del Periodista, el obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, envió un saludo a los profesionales que "sirven a la verdad" y les compartió una reflexión en torno al relato evangélico del extravío y del hallazgo del Niño Jesús en el templo. También les pidió trabajar para generar "ese movimiento interior que anime a pensar" y juntos avanzar en la construcción de un país mejor.
Siguiendo la escritura según san Lucas, el obispo recordó que el Niño Jesús se quedó en el templo conversando con los doctores y contestando sus preguntas, y dijo que "Jesús, desde niño, sintió este deseo de servir a la verdad, de compartir con los demás, de comunicar con los demás aquello que sentía y que vivía, su vocación de hijo de Dios".
"Servir a la verdad significa, no solamente informar, lo cual es muy importante, servir a la verdad significa también ayudar a pensar; mover a pensar; a pensar con libertad; a reflexionar; ser maestros que sirven para que la comunidad aprenda a dialogar; pueda intercambiar opiniones sentimientos; pueda aceptar diferencias, es decir, comunicarse mejor, aceptarse mejor", observó el prelado.
Monseñor Ojea lamentó que se vivan tiempos de "muchísima intolerancia" e incluso de "cierta bipolaridad", aguzada por este tiempo electoral. "El periodista, sin embargo, debe tratar de mover a pensar los problemas en serio, a reflexionar seriamente sobre lo que pasa en nuestro país, en cada sector, y ayudar a los hermanos, a no hacer diferencias en cuanto el pensamiento", manifestó el obispo.
"Tenemos zonas de nuestra vida y de nuestro quehacer que tenemos que pensar juntos, más allá de a qué partido pertenecemos o de a quien vayamos a votar. Nuestro pensamiento no puede quedar acotado por este sistema de poder encubierto, sino que nuestro pensamiento tiene que aflorar y manifestarse con libertad y también con creatividad; no servir a determinadas estrategias, sino que la única estrategia sea la verdad, el respeto por la dignidad de la persona y la necesidad de aportar elementos para que los hermanos puedan reflexionar", expresó el prelado.
"Este servicio tan fundamental y tan importante de la comunicación lo cumple el periodista", añadió.
Monseñor Ojea agradeció el trabajo de los periodistas y los animó, una vez más, a trabajar para generar "ese movimiento interior que anime a pensar" para juntos avanzar en la construcción de un país mejor.+