Viernes 22 de noviembre de 2024

Mons. Azpiroz: 'Estamos llamados a someter todas las cosas a Dios'

  • 29 de noviembre, 2023
  • Bahía Blanca (Buenos Aires) (AICA)
El arzobispo bahiense presidió la misa en la parroquia San Luis Gonzaga y recordó que el Reino de Dios se construye con "los pobres, los mansos, los que son humildes, los que construyen la paz".
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El arzobispo de Bahía Blanca, monseñor Carlos Azpiroz Costa OP, presidió la Eucaristía el domingo 26 de noviembre en la parroquia San Luis Gonzaga, donde impartió el sacramento de la Confirmación a un grupo numeroso de chicos de esa parroquia y también de las capillas Nuestra Señora de Fátima, Nuestra Señora de la Dulce Espera, Sagrada Familia y Santa Rita. Concelebró la misa, el párroco, presbítero Juan Francisco Micheletto.

En la homilía, el prelado manifestó: “¿Cuáles son los que serán bienvenidos y bienaventurados en el Reino? ¿Los más vivos, los más avivados, quiénes? Los pobres, los mansos, los que son humildes, los que construyen la paz, los perseguidos por la justicia”.

Luego, recordó que “si el bien triunfa sobre el mal y el Espíritu Santo obra en mí, le da dinamismo y vida a lo que acabo de hacer, eso significa que el Reino de Dios está por venir”. 

Y señaló: “¿Cuál es el camino del Señor? Cuando vamos leyendo el Evangelio, aunque no seamos expertos, vemos la sencillez. Nunca Jesús dice: ‘Aquí mando Yo y se callan todos’. No, al contrario, Él es sencillez, humildad, misericordia, compasión, adoración a Dios y servicio a los hombres”.

Monseñor Azpiroz preguntó: “¿Qué rey se saca el manto, se ata una toalla y lava los pies de los suyos?, o qué rey dice: '¿Vengan a gobernar conmigo?' Para entender cómo es este rey, Jesús se hace uno de nosotros”. “Jesús, el Buen Pastor, no es como el ladrón que quiere a las ovejas para matarlas o robarlas; no es como el mercenario ni como un desconocido, porque las ovejas no siguen a un desconocido”, agregó.

Finalmente, manifestó: “Estamos llamados a someter todas las cosas a Dios, somos ungidos. Nuestro Buen Pastor es aquel que nos apacienta, nos da el poder, lleva a sus ovejas a descansar, las sana. En cambio, el mal pastor busca agrietar, dividir y separar. Lo que hace el Buen Pastor es reunir”.+