Viernes 19 de abril de 2024

Mataron a su hermano y pide que la sociedad reflexione sobre el perdón

  • 10 de septiembre, 2013
  • Mendoza (AICA)
Hernán Prado, hermano de un joven médico asesinado días atrás en Mendoza, lideró una manifestación por el centro mendocino en la noche del lunes, con la cual buscó transmitir la importancia del perdón y del arrepentimiento. Sostuvo que perdonaría al asesino, porque así lo hace Dios con cada uno de los pecadores. "Esto viene de la fe. Yo soy católico, creo en Jesucristo. Si Dios nos perdona día a día y nos da la oportunidad de ´reiniciarnos´, ¿cómo no voy a ser capaz de perdonar a un semejante?", expresó.
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Unas 3.000 personas se congregaron en la noche del lunes 9 en la peatonal Sarmiento y San Martín, en el kilómetro cero de la capital provincial, para reclamar justicia por el asesinato de Sebastián Prado, un joven médico que fue asesinado días atrás cuando le intentaron robar la camioneta. Anoche, su hermano Hernán dejaba un fuerte testimonio de su vida cristiana: "El que mató a mi hermano es también un hermano mío. Esto es lo que quiero inculcarle a mis sobrinos e hijos: yo elijo el perdón, transmitir el perdón".

Hernán Prado, de 39 años, casado, con cuatro hijos, formado en el instituto San Vicente Ferrer, enfrentó a las cámaras, micrófonos y celulares de los medios y aseguró que desea tener al asesino de su hermano en persona para abrazarlo, perdonarlo, y llorar juntos.

"Esto viene de la fe. Yo soy católico, creo en Jesucristo. Si Dios nos perdona día a día y nos da la oportunidad de ´reiniciarnos´, en el caso de los católicos mediante el sacramento de la confesión, ¿cómo no voy a ser capaz de perdonar a un semejante?", expresó, al borde de las lágrimas. A la marcha también asistieron decenas de familiares de víctimas, que con llanto, súplicas o gritos adherían al dolor de una familia. Los Prado, por su parte, permanecían juntos y en silencio.

Los periodistas, incrédulos, le preguntaron qué haría en caso de tener al asesino enfrente suyo. "Lo abrazaría, lloraría mucho, y le diría que puedo ser como un hermano. Que lloro por mi hermano, y lloro por él. De hecho, si viene y habla conmigo, yo no voy a entregarlo. Ese es trabajo de la justicia. Si pide perdón, para mí es suficiente. No lo voy a agarrar, ni nada", respondió.

Para despedirse de los que se hicieron presentes en la peatonal, simplemente expresó que la convocatoria era para revalidar la importancia del perdón y del arrepentimiento. Y pidió que cada uno haga un punto de inflexión en su vida y cambie en lo poco, porque sólo así se hará mucho. "Esto no es para los que profesamos el credo católico. Todas las religiones hablan del amor", recalcó.+