Jueves 21 de noviembre de 2024

Los obispos cubanos alientan a su pueblo en tiempos de pandemia y dificultades

  • 11 de marzo, 2021
  • La Habana (Cuba) (AICA)
Al concluir la Asamblea Plenaria los Obispos invitan a la esperanza y la fe renovada, y a hacer de sus hogares pequeñas iglesias, a rezar por los que sufren y a renovar la fe en Cristo.
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Los obispos de Cuba celebraron su 157ª Asamblea Plenaria en el santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de la Isla, para recordar los 170 años de la primera visita realizada por San Antonio María Claret a ese lugar de peregrinación.

En su mensaje de cierre, los prelado cubanos expresaron: “No queremos marcharnos de este santo lugar sin dirigirles unas sencillas palabras de afecto y aliento".

Tras reconocer que se viven momentos que "no son fáciles”, exhortaron a los cubanos a que "sepan crecer, una vez más, ante las dificultades" y los invitaron "a hacer de sus familias una pequeña iglesia, una comunidad doméstica donde se rece el padrenuestro y el avemaría”.

“Pensamos y rezamos especialmente por los que se contagiaron con la epidemia, así como por todo el personal de salud que los atiende y los científicos que han venido trabajando en busca de diversas vacunas”.

“Pensamos y rezamos por los que sienten el temor a contagiarse o a contagiar a los miembros más vulnerables de la familia. Pensamos y rezamos, del mismo modo, por el esfuerzo de ustedes para conseguir el pan, las medicinas y la fortaleza necesaria para vivir el día a día”.

Los obispos cubanos agradecieron “la disponibilidad y generosidad de servicio con la que tantos de ustedes comparten el pan, las medicinas y el ánimo con los que más lo necesitan”.

Asimismo, invitaron en este tiempo de Cuaresma a llenar de esperanza y fe renovada cada uno de los corazones, porque “estamos convencidos de que, unidos a Cristo en su entrega y amor en la cruz, participamos en su victoria sobre la muerte y el mal”.

“Compartimos la pena de muchos al no poder reunirse en los templos y casas de misión para las celebraciones habituales del domingo como día del Señor”, por tanto “en cualquier circunstancia el domingo es el día de la alabanza, de la acción de gracias y del compartir en familia”.

“Estemos seguros de que la Virgen de la Caridad, al igual que acompañó a nuestro pueblo a lo largo de su historia, está también ahora a nuestro lado. Ella conoce nuestras ilusiones, angustias y esperanzas”, finalizaron.+