Martes 19 de marzo de 2024

"¡Es la hora del Ecuador!": Mensaje de los obispos tras las elecciones

  • 14 de abril, 2021
  • Quito (Ecuador) (AICA)
Tras las elecciones que derivaron en el triunfo del empresario Guillermo Lasso, los obispos hicieron un llamamiento a las autoridades electas invitándolos a "dar lo mejor de sí".
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“Queremos dirigirnos a quienes fueron electos para recordarles su compromiso de dar lo mejor de sí, de tal modo, que las aspiraciones de nuestro pueblo sean satisfechas, tal como lo prometieron durante la campaña electoral”, escribe la Conferencia Episcopal Ecuatoriana tras la jornada electoral que vivió el país sudamericano el domingo 11 de abril y que derivó en el triunfo del empresario Guillermo Lasso con más del 50% de los votos.

“La campaña quedó atrás. ¡Es la hora de Ecuador!”, señalan los obispos en la nota recibida en AICA, tras hacer un llamado “a gobernar con sabiduría, a legislar con justicia y a fiscalizar con transparencia”.

“Nuestro llamado a estar siempre cercanos a la población, compartiendo y escuchando sus necesidades, especialmente a las personas más vulnerables, de tal modo que, juntos, encuentren las mejores soluciones”, prosiguen.

De igual modo piden “superar los fanatismos ideológicos y las posiciones extremistas” por ende quienes asumen el poder en la primera jefatura del país deben “gobernar con sabiduría, legislar con justicia y fiscalizar con transparencia”.

“Nuestro llamado es a estar siempre cercanos a la población, compartiendo y escuchando sus necesidades, especialmente a las personas más vulnerables, de tal modo que juntos encuentren las mejores soluciones”.

Al nuevo presidente piden “asumir el poder como un servicio a la comunidad” y “no como un poder de dominación, de prestigio social o de privilegios personales, familiares y partidistas”.

Además, recuerdan que “los pobres no son objeto ni medios para conquistar el poder y perpetuarse en él, sino que son sujetos de su propia historia”.

Una vez más reiteran su llamado al respeto de la vida como derecho humano fundamental como al derecho a la educación integral y al trabajo digno, por tanto “reivindicamos nuestro derecho a levantar nuestra voz profética para denunciar el olvido de los débiles”. +