Festejos por la vida consagrada en la diócesis de San Justo

Con la presencia del obispo, Mons. Eduardo García, las comunidades religiosas asentadas en esa jurisdicción festejaron su día el sábado 9 de septiembre, en un monasterio dominico de Villa Luzuriaga.

Las comunidades de la Vida Consagrada de la diócesis de San Justo celebraron su día en el monasterio de Santa Catalina de Siena, de la localidad Villa Luzuriaga. Fue en el marco de la festividad en la Argentina, que a diferencia de otras partes del mundo se conmemora el 8 de septiembre.

El encuentro comenzó con una misa presidida por el obispo de San Justo, monseñor Eduardo García, y concelebrada por el presbítero Carlos Rúffolo, delegado diocesano para la Vida Consagrada; el padre Juan Carlos Meinvielle y el padre Vicente Tirabasso, ambos salesianos ; el padre Daniel Echeverría y el padre Anaclet Mbuguje (de los Misioneros de los Sagrados Corazones); y el padre Selso Feldkircher (de los Siervos de la Caridad).

Durante la celebración, fueron presentados los carismas presentes en la realidad pastoral diocesana. En la homilía, monseñor García expresó la importancia de que los consagrados sean auténticos anunciadores del Reino, pidiéndole a Jesús una verdadera purificación de los criterios mundanos y legalismos fariseos, para poder manifestar el rostro materno de la Iglesia: mostrar cada día, desde cada carisma, caminando con el pueblo, que la Iglesia es “mamá”.

Al finalizar la Eucaristía, se realizó la foto de familia en la capilla del monasterio. Cada consagrado recibió un recordatorio, bendecido con las palabras del Papa Francisco: "Todos. Todos. Todos. En la Iglesia hay lugar para todos... Y esa es la Iglesia, la madre de todos." (JMJ Lisboa 2023).

Luego, en el locutorio tuvo lugar un ágape fraterno, en el que los consagrados compartieron sus experiencias pastorales en los barrios; conversaron acerca de los próximos acontecimientos a celebrar -como los 50 años del monasterio de Santa Catalina de Siena- y en torno al encuentro en diciembre para preparar la Navidad; e intercambiaron propuestas para el camino hacia el Jubileo 2025.

En la diócesis de San Justo, se encuentran asentadas estas comunidades de Vida Consagrada: las Monjas Dominicas (contemplativas de clausura, en cuyo monasterio se realizó el encuentro), el Orden de Vírgenes, los Siervos de la Caridad, las Franciscanas Terciarias de la Caridad Cristiana, las Hijas de María Auxiliadora, los Sacerdotes de Don Bosco, las Hijas de Santa María de la Providencia, las Siervas del Corazón de Jesús, las Religiosas Dominicas de la Anunciata, las Oblatas Diocesanas, las Pequeñas Hermanas de María, la casa de Espiritualidad Nuestra Señora de la Esperanza, las Hermanas de la Sagrada Familia de Urgel, las Hermanas de la Sagrada Familia de Burdeos, las Hermanas Dominicas del Santo Rosario, las Misioneras de San Carlos de Borromeo, las Hermanas del Instituto Alianza en Jesús por María, la Orden Hospitalaria San Juan de Dios, los Sacerdotes del Corazón de Jesús (o dehonianos), la Orden de los Frailes Menores (en Ciudad Evita) y las Hermanas Oblatas del Santísimo Redentor.+