Jueves 17 de octubre de 2024

Cardenal Parolin: 'África es una tierra de esperanza'

  • 28 de mayo, 2024
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
El Secretario de Estado del Vaticano manifestó que el continente africano tiene el potencial y los recursos para afrontar los desafíos, pero "las personas y su bienestar deben estar primero".
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El cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado del Vaticano presidió la celebración eucarística, en la tarde del lunes 27 de mayo, en la basílica mariana de Santa María la Mayor de Roma con motivo de la 61ª Jornada de África.

Participaron de la celebración eucarística los embajadores del Grupo Africano ante la Santa Sede, las misiones diplomáticas africanas residentes acreditadas ante la República Italiana y las representaciones africanas permanentes acreditadas ante las Naciones Unidas, FAO/PMA/FIDA. También asistieron prelados africanos de la Curia Romana y sacerdotes africanos en Italia.

La misa conmemoró al primer embajador africano ante la Santa Sede, Antonio Manuel N'Vunda, que fue enterrado en la cripta de la Basílica de San Pedro en enero de 1608. Antes de la liturgia, se depositaron respectivamente dos coronas de flores sobre la tumba del Papa Pablo VI en la Capilla Paulina y en la tumba de N'Vunda.

Retos y esperanzas
En su homilía, el cardenal Parolin citó las palabras sobre África de Benedicto XVI y, antes que él, de San Juan Pablo II en la exhortación apostólica postsinodal Ecclesia in Africa de 1995, destacando los desafíos, las dificultades y los "contrastes" del continente, pero también sus aspectos de esperanza.

"Esta celebración tiene para mí un aspecto personal porque me siento cerca de África", dijo Parolin a los medios vaticanos al margen de la celebración, recordando que "a lo largo de los años he podido visitar varios países y he tenido contacto tanto con la Iglesia como con los gobiernos y autoridades”.

"Para mí -compartió- es un momento de alegría estar aquí y compartir la alegría y la oración".

La necesidad del apoyo de la comunidad internacional
"Creo añadió el Secretario de Estado- que África debe triunfar por sí sola; tiene la fuerza, tiene los recursos, tiene riquezas de todo tipo, pero también necesita amigos sinceros de la comunidad internacional que trabajen por el pueblo, por la paz, por la reconciliación y por el desarrollo".

El apoyo de la comunidad internacional, subrayó el cardenal Parolin, es necesario porque el continente "se encuentra en situaciones muy difíciles" en medio de muchos "conflictos muy violentos que causan mucho sufrimiento a muchas personas". "Basta pensar en el este del Congo", añadió.

Si bien el cardenal expresó su convicción "de que existe la posibilidad de emerger", reconoció que "el principio es siempre el mismo: hay que poner en primer lugar al pueblo y su bienestar".

"Si se priorizan los intereses materiales, entonces ciertamente se sacrifica a personas y no hay posibilidad de paz". "Sin embargo, si hay justicia, si hay acceso para todos incluso a la riqueza material, y esta es tarea tanto de las autoridades locales como de la comunidad internacional, entonces las cosas pueden mejorar", añadió.

La ayuda de la Santa Sede
Además el cardenal Parolin aseguró que "la Santa Sede ayuda a nivel de la Iglesia africana porque somos una sola familia, y también a través de las Nunciaturas y del interés directo que el Papa muestra hacia África". "Donde podemos -insistió- tratamos de echar una mano".

Día Mundial de África
Los pueblos del continente africano celebran el 25 de mayo el Día Mundial de África, porque en esta fecha se firmaron en 1963 los acuerdos de la Organización de la Unidad Africana (OUA), que simbolizan la lucha de todo el continente por la liberación, el desarrollo y el progreso económico y social, así como como la promoción y explotación de la riqueza cultural de África. 

La OUA era una organización intergubernamental establecida el 25 de mayo de 1963 en Addis Abeba, Etiopía, con 33 gobiernos signatarios. La Unión Africana (UA) se inauguró oficialmente en julio de 2002 en Durban, Sudáfrica, tras la decisión adoptada en septiembre de 1999 por la OUA, su predecesora, de crear una nueva organización continental para aprovechar su trabajo.

La fecha del 25 de mayo tiene un doble poder evocador. En primer lugar, recuerda de forma conmemorativa los primeros momentos de la OUA. En segundo lugar, geopolítica e institucionalmente, plantea constantemente interrogantes sobre la capacidad individual y colectiva para construir el África imaginada por los padres fundadores.

La Jornada se ha convertido así en una tradición profundamente arraigada en todos los países africanos y es una oportunidad para que las misiones diplomáticas africanas acreditadas ante la Santa Sede organicen actos destinados a sensibilizar sobre el papel del continente en el mundo.+