Martes 23 de abril de 2024

Cambio climático: crear nuevos modelos de desarrollo, pidió el Card. Parolin

  • 26 de enero, 2021
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
Videomensaje del Secretario de Estado en la inauguración de la Cumbre de Adaptación Climática 2021: mitigar los efectos negativos del cambio climático y fortalecer la resiliencia entre los pobres
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El Secretario de Estado del Vaticano, cardenal Pietro Parolin intervino con un videomensaje, en nombre del papa Francisco, en la inauguración de la Cumbre de Adaptación Climática 2021, un encuentro en línea organizado por los Países Bajos los días 25 y 26 de enero.

La reunión analiza los avances generados por la última Cumbre de Acción Climática de Naciones Unidas, celebrada en Nueva York en septiembre de 2019, ilustrando soluciones pioneras a la emergencia climática, para continuar el camino hacia la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático COP26 en Glasgow, del 1 al 12 de noviembre de 2021. En particular, los organizadores solicitaron nueva financiación internacional para la investigación agrícola y asesoramiento a los agricultores, para que puedan adaptarse a los efectos del cambio climático en la producción de alimentos.

Acción rápida para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero
El “desafío trascendental para el bien común” que constituye el cambio climático, explica el cardenal Parolin en su discurso, requiere “una acción rápida” para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y la mitigación de sus efectos negativos, combinada con “fortalecer la adaptación y la resiliencia”. 

Es un imperativo moral y humanitario, prosigue el Secretario de Estado vaticano, “porque las consecuencias negativas más graves del cambio climático suelen afectar a los más vulnerables: los pobres y las generaciones futuras”. Los pobres, que son “los menos responsables del calentamiento global”, lamentablemente son “los más propensos a verse afectados, ya que tienen menos capacidad de adaptación y, a menudo, viven en zonas geográficas de especial riesgo”.

Actividades complementarias de mitigación y adaptación
Estas actividades complementarias de mitigación y adaptación, aclara el Secretario de Estado, requieren “el desarrollo de una estrategia global y compartida de largo plazo basada en compromisos precisos, capaz de definir y promover un nuevo modelo de desarrollo y construido sobre el vínculo sinérgico entre la lucha contra el cambio climático y la lucha contra la pobreza “. Porque “nada se puede conseguir trabajando solo. La pandemia de Covid-19 lo demuestra muy bien”.

Para ello, prosigue el cardenal, “es necesaria una cooperación internacional más fuerte, comprometida con el desarrollo sostenible bajo en carbono, así como la inversión en el fortalecimiento de las tecnologías y la resiliencia, y su transferencia en términos justos, particularmente a los países más vulnerables”.

Esta es la elección del primer camino posible señalado por el papa Francisco en su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas el pasado mes de septiembre, citado por el cardenal Parolin: el de “fortalecer el multilateralismo, expresión de una renovada corresponsabilidad global” frente a lo que “favorece actitudes de autosuficiencia, nacionalismo, proteccionismo, individualismo y aislamiento, excluyendo a los más pobres, a los más vulnerables”, que es “autolesiones para todos”.

Oportunidad de mejorar las condiciones generales de vida
La esperanza del Papa, subraya el Secretario de Estado, “es que la respuesta al cambio climático sea una oportunidad para mejorar las condiciones generales de vida, la salud, el transporte, la energía y la seguridad, y para crear nuevas oportunidades laborales”. 

La tarea “es difícil y compleja”, concluye el cardenal, pero “tenemos la libertad, la inteligencia y la capacidad de orientar y dirigir la tecnología” y ponerla al servicio de otro tipo de progreso: más humano, social e integral“. También debemos “demostrar que tenemos la voluntad política y la motivación para llevar a cabo este compromiso”.+