Viernes 28 de febrero de 2025

A los 90 años, falleció la fundadora del Carmelo de Brandsen

  • 28 de febrero, 2025
  • Chascomús (Buenos Aires) (AICA)
El deceso de la Hna. Ma. Angélica de Santa Teresa -quien fue una figura central en la creación del monasterio del Sagrado Corazón de Jesús, de esa localidad bonaerense- se produjo el 20 de febrero.
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El jueves 20 de febrero, los 90 años, falleció la hermana María Angélica de Santa Teresa, quien fuera una figura central en la creación del monasterio del Sagrado Corazón de Jesús, en Brandsen (Provincia de Buenos Aires). Su partida deja un profundo vacío en la comunidad carmelitana y en todos aquellos que la conocieron por su devoción, su sabiduría y su incansable labor en la construcción y desarrollo del Carmelo de esa localidad bonaerense.

Nacida el 17 de abril de 1934 en Chivilcoy, bajo el nombre de Nelly Yolanda Martínez, la hermana María Angélica ingresó al monasterio de Carmelitas Descalzas de Corpus Christi, ubicado en la ciudad de Buenos Aires, el 5 de junio de 1960, solemnidad de Pentecostés, adoptando el nombre religioso de María Angélica de Santa Teresa. En 1961, luego de un año de noviciado, hizo su primera profesión y, dos años más tarde, en 1964, realizó su profesión solemne en el monasterio de Alta Gracia (Córdoba), donde también desempeñó importantes cargos, como el de priora y maestra de novicias.

Con su gran fervor evangelizador y muchas nociones ligadas a la construcción, la hermana María Angélica fue una pieza clave en la creación del monasterio de Brandsen, una obra que comenzó a gestarse a comienzos de la década de 1980. Así, el 21 de marzo de 1985, bajo su liderazgo, se inauguró el monasterio del Sagrado Corazón de Jesús en esa localidad, donde ella desplegó sus capacidades para la edificación, contribuyendo a la construcción no solo la Capilla y las celdas, sino también de la hospedería para los familiares, dejando una huella perdurable en la vida de la comunidad religiosa.

A lo largo de los años, además de su labor edificadora, la hermana María Angélica se destacó por su amor y dedicación al servicio de las demás, fabricando dulces, tejiendo prendas para los necesitados y siendo un referente espiritual para muchas personas. A pesar de sus dificultades de salud, especialmente en cuanto a su pérdida progresiva de visión, nunca dejó de alabar a Dios con su voz angelical y de ofrecer su sufrimiento por el bien de los demás.

Con una personalidad abierta y alegre, pasó por tiempos de dolor y purificación, pero siempre manteniendo su carácter vivaz. En los últimos años de su vida, disfrutó con diversas personas que la visitaban de momentos de diálogo y reflexión profunda, siempre interesada en escuchar y aprender.

Su fallecimiento, ocurrido el 20 de febrero tras el almuerzo, cierra un capítulo de una vida entregada al servicio de Dios y de la comunidad, dejando un legado imborrable, dado que la hermana María Angélica será recordada con cariño y gratitud por todos aquellos que compartieron con ella su camino de fe.+