Pidió que se publicara póstumamente. Con el título 'La imagen cristiana del hombre', reflexiona allí sobre la creciente secularización, la importancia de la familia y la falsa idea de libertad.
Cualquiera que dependa del deseo de riqueza, fama y honor no es libre de amar a Dios y al prójimo, recordó el Santo Padre este domingo durante el rezo del Ángelus en la plaza de San Pedro.
El obispo de San Francisco, en su meditación sobre la solemnidad de la Santísima Trinidad, se centró en el vínculo personal y libre que nos une con el Creador.
La libertad cristiana no es individualista, no acaba donde empieza la del otro, sino que tiene una dimensión comunitaria, explicó Francisco durante la audiencia general.