El papa Francisco no asistirá hoy a la basílica de San Juan de Letrán para la liturgia penitencia del comienzo de la Cuaresma con el clero romano, en la que debía confesar a algunos sacerdotes a causa de una leve indisposición, el pontífice prefirió continuar con sus actividades en los ambientes cercano a la Casa Santa Marta, informó el director de la sala de prensa vaticana, Matteo Bruni.
"No nos desanimemos, Dios está purificando a la Iglesia, su novia, sorprendida en el flagrante adulterio y nos salva de la hipocresía", dijo esta mañana, el papa Francisco, en la basílica papal de San Juan de Letrán, a los párrocos y sacerdotes de la diócesis de Roma con motivo del encuentro tradicional al principio de la Cuaresma.
"Para vivir, crecer y perseverar en la fe hasta el final, debemos nutrirla con la Palabra de Dios y pedir al Señor que la acreciente", dijo esta mañana el papa Francisco al clero romano, en el tradicional encuentro del obispo de Roma con sus sacerdotes al comienzo de la Cuaresma. El encuentro tuvo lugar en la basílica de San Juan de Letrán y antes de ofrecerles una meditación, el pontífice confesó a quince sacerdotes.
En su reciente encuentro cuaresmal con el clero de Roma, que no fue cubierto por la prensa, Francisco fustigó duramente a quienes hicieron falsas acusaciones contra algunos sacerdotes y dijo que tomará medidas contra los culpables. "Me sentí muy golpeado y comparto el dolor de ustedes", expresó. Se refería a declaraciones del exsacerdote Patricio Poggi, acusado de delitos sexuales, que ante la justicia acusó a un grupo de clérigos de la diócesis de Roma como parte de un supuesto circuito de abusadores. Tras varias investigaciones y dañinos titulares en los medios, el juez concluyó que las acusaciones de Poggi eran "parte de un sórdido complot" y procedió a su detención.