"El servicio es el legado que nos deja esta figura que Dios le regala a Catamarca y al país", afirmó el obispo de esa diócesis, Mons. Urbanc, en los actos por los 198 años del natalicio del beato.
Serán varias las actividades, celebraciones y festejos por el primer aniversario de Fray Mamerto Esquiú como beato y también en reconocimiento a la patrona de la diócesis, Nuestra Señora del Valle.
Vecinos trasladaron la imagen del futuro beato en una caravana de autos, motos y bicicletas hasta el templete de la localidad catamarqueña de San José de Piedra Blanca, donde fue entronizada.
Los fieles catamarqueños podrán venerar a fray Mamerto Esquiú ante una imagen que será entronizada el 31 de octubre en su casa natal, en la localidad de Piedra Blanca.