"Generando confianza se puede construir una sociedad verdaderamente fraterna y estable" sostuvo el obispo de San Isidro en su reflexión semanal.
En este segundo domingo de adviento, con el llamado a la conversión, el obispo de Mar del Plata resumió en tres palabras su mensaje: historia, conversión y grito.
El obispo explicó el origen de la palabra "sínodo" y exhortó a las comunidades parroquiales para preguntarse cómo están viviendo este "modo de ser Iglesia sinodal".
El obispo de Mar del Plata animó a dejar de lado las preocupaciones porque "el Hijo del Hombre viene a traernos liberación" y "nos anima a levantar la cabeza".