Fue el pedido que les hizo el arzobispo porteño a los seminaristas Claudio Cuellar, Agustín Cisnero, Pablo Nieto y Agustín Lanzetta que recibieron la admisión al Orden Sagrado.
Mons. Eduardo Martín subrayó que este crecimiento vocacional es "una gracia de Dios" y agradeció el compromiso de "tantas personas que oran incesantemente por las vocaciones".
En una misa en la parroquia de Nuestra Señora de La Salette, la comunidad despidió a Renzo Enríquez, Juan Ibarra y Elián Gómez. "Dios nos regala dones en la vidas para dar frutos buenos", les recordó.
La delegación se compone de 31 seminaristas de las tres diócesis de esa provincia: Posadas, Oberá y Puerto Iguazú. Se alojan en la casa sacerdotal La Posta de Brochero, en Cruz del Eje.