El arzobispo mayor de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana, denunció que hay "cinco millones" de ucranianos al borde de la inanición y esta tragedia no aparece en las noticias del mundo.
El P. Gabriel Romanelli destacó el "fuerte vínculo" de los cristianos de la Franja con el pontífice y su predecesor. La mayor esperanza es "poder vivir en nuestra tierra".
Pidió que estas tragedias abatan el muro de la indiferencia. También llamó a hacer un esfuerzo por eliminar la esclavitud laboral de niños e instó a ayudar ante la hambruna en Tigray, Etiopía.
En los próximos meses, más de 2,2 millones de burkinabés corren el riesgo de morir de hambre debido a los conflictos en curso y las condiciones climáticas extremas, advirtió Cáritas Burkina Faso.