"Llevo en el corazón el sueño de la paz, el sueño de los jóvenes que rezan por la paz, viven en paz y construyen un futuro de paz", expresó el Papa tras rezar la oración mariana junto con los jóvenes.
"Destruir el trigo es una grave ofensa a Dios, porque es su don para alimentar a la humanidad", indicó el pontífice tras el rezo del Ángelus de este domingo. También se refirió a la trata y al Líbano.
Durante el Ángelus dominical, el Papa elevó su oración a la Virgen María, para que "ayude a cultivar con paciencia lo que el Señor siembra en los campos de la vida".
El Papa llamó a manifestar "sentimientos de fraternidad, solidaridad y acogida" hacia los migrantes, y pidió a las naciones en general que limiten las emisiones de sustancias contaminantes.