Durante la oración mariana, el Santo Padre les recordó a los miles de fieles reunidos en la Plaza de San Pedro, que "la fe y la confianza en el Señor tienen el poder de salvarnos a todos".
"Oremos para que todo lo que hemos hecho este mes sea por el bien de la Iglesia", dijo el Papa después del Ángelus. También pidió oraciones por la paz en el mundo.
Francisco participó de la asamblea diocesana de Roma, durante la que subrayó la necesidad de llevar el Evangelio a los pobres, reparar los desgarros del tejido social y sembrar semillas de esperanza.
Lo afirmó en la exposición "El Libro y el Espíritu", que se realiza en la Biblioteca Apostólica Vaticana, a 750 años de la muerte de ambos doctores de la Iglesia.