El más ilustre apologista cristiano del siglo II. Nació en Flavia Neapólis, hoy Naplusa, Jordania, hacia el año 100. Estudió todos los sistemas filosóficos de su tiempo -Pitágoras, Aristóteles, Platón, los estoicos- hasta llegar al conocimiento de la fe cristiana. Una vez convertido, abrió en Roma la primera escuela de filosofía y enseñó "la eminente ciencia de Jesucristo". Le dieron gran celebridad sus dos apologías que tuvo el valor de dirigir a los emperadores Antonino Pío y Marco Aurelio. Este último lo mandó azotar y pronunció contra Justino la pena de muerte. Murió así, mártir, el año 165.