Jueves 21 de noviembre de 2024

Sudáfrica: La Iglesia condena los saqueos, que atribuye a la pobreza de la gente

  • 15 de julio, 2021
  • Johannesburgo (Sudáfrica) (AICA)
El episcopado sudafricano condenó hoy los saqueos y la violencia que desde hace una semana azotan al país y que ya han causado la muerte de más de 70 personas y unas 1.200 detenciones.
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Los obispos sudafricanos condenaron los saqueos y la violencia que azotan al país desde hace una semana y que atribuyen a la grave situación social por la que pasan los sectores más desfavorecidos. Las imágenes de cientos de personas arrasando supermercados y tiendas, y de la policía disparando a los saqueadores han dado la vuelta al mundo.

Los obispos condenan enérgicamente todo este vandalismo y violencia, al tiempo que advierten del peligro de «anarquía» y del incremento de contagios por Covid. 

“A los que incitan a esta violencia y a los saqueos con fines políticos, les pedimos que se sitúen por encima de los intereses políticos, para proteger la vida y preservar el bien común. A fin de cuentas, fue el diálogo y no la violencia lo que nos llevó a la consecución de la democracia”, afirma la Conferencia de Obispos Católicos de Sudáfrica (SACBC) en una declaración firmada por su presidente, el obispo de Mthatha, monseñor Sithembele Sipuka.

No obstante, a continuación se reconoce también que “la crisis actual se debe en gran medida a las extremas desigualdades económicas” existentes, “así como a las dificultades económicas sufridas por los pobres durante la pandemia”. 

“Se trata de cuestiones -denuncia la Sacbc- que nuestro gobierno, las empresas y el sector corporativo no han abordado a lo largo de los años de manera integral. Lo que empezó como una diferencia de opinión ha desencadenado un incendio de violencia y saqueos porque se ha dejado que la “hierba seca” de la pobreza “crezca” durante décadas. Un factor que contribuye en gran medida a esta “hierba seca” de la pobreza es la falta de liderazgo eficiente en el gobierno y las prácticas poco éticas en las empresas”.

La Iglesia lamenta que en la sociedad sudafricana se haya “normalizado el uso de la violencia y el vandalismo para conseguir que el gobierno escuche y se tome en serio los problemas económicos de los pobres”. 

“Necesitamos -se afirma a este respecto- un cambio de mentalidad, una conversión colectiva del corazón y de la mente, que afirme que las protestas violentas y la destrucción de la propiedad nunca pueden ser una respuesta justa a las dificultades económicas actuales y a la injusticia económica”.

Los obispos terminan su declaración recordando que “ante los problemas políticos y económicos siempre existe la posibilidad de elegir el compromiso constructivo en lugar de la violencia”. Y piden, con el papa Francisco, a políticos y empresarios que se sientan verdaderamente interpelados por la gente y la vida de los pobres.+