Jueves 21 de noviembre de 2024

Mons. Lozano animó a rezar por la paz y la fraternidad

  • 11 de septiembre, 2022
  • San Juan (AICA)
Parafraseando el lema de la Colecta Más por Menos, invitó a pedir "más ternura por menos agresión, más diálogo por menos soberbia, más amor por menos indiferencia, más equidad por menos exclusión".
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“Hay una palabra que se va escuchando cada vez con mayor frecuencia, aun cuando es difícil de pronunciar: ‘procrastinar”. Según el diccionario de la Real Academia Española significa ‘diferir, aplazar’. En el uso corriente se refiere a una forma de evadir o eludir responsabilidades y decisiones, usando otras actividades más placenteras como refugio. En el lenguaje común decimos ‘hacerse el distraído’ mirando para otro lado”. Con esta observación inició su reflexión semanal monseñor Jorge Eduardo Lozano, arzobispo de San Juan de Cuyo y secretario general del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam)

El arzobispo sanjuanino advirtió que “la tendencia a buscar una vida cada vez más cómoda y ‘sin problemas’ nos vuelve individualistas, egoístas y nos va achicando horizontes de sentido. Para quienes reconocemos a la humanidad como una sola familia debemos cuidarnos de estas tendencias tan frecuentes”.

“Este fin de semana se realiza en la Argentina la Colecta Más por Menos, una de las más conocidas en cuanto a emprendimientos solidarios”, recordó, y señaló que “con lo recaudado se sostienen servicios de promoción humana, actividades comunitarias que buscan paliar las consecuencias de la crisis económica y social. La pobreza creciente golpea de manera contundente y sin ideologías”.

Monseñor Lozano explicó que el lema que inspira este año la campaña solidaria tiene dos partes: “Aliviando el dolor de hoy, alimentamos la esperanza”.

“El dolor de los hermanos y hermanas debemos atenderlo hoy; mañana o la semana próxima puede ser tarde. Hay una urgencia que atender. Es sabia la expresión popular que dice ‘no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy’. Para eso es necesario romper la burbuja en la que vivimos y pasar del yo al nosotros. Hace falta pensar en plural, en conjunto”, planteó, y consideró: “Es tiempo de desplegar sueños comunitarios para crecer en fraternidad. Anhelamos una sociedad con espacio para que todos los habitantes tengan una vida digna”.

Y prosiguió desgranando el lema: “La segunda parte del lema asegura que de ese modo ‘alimentamos la esperanza’. Hay un clima de decepción en muchas familias; las experiencias del fracaso hunden en una sensación de impotencia. La exclusión reiterada de modo permanente hace que la “esperanza” sea una palabra vacía o una realidad débil, casi raquítica”.

“La solidaridad, la cercanía, acrecientan la confianza. Transmiten expresiones de aliento que tienden una mano para salir de la postración”, destacó.

El arzobispo argentino en el Celam señaló que este fin de semana, en coincidencia con la Colecta Más por Menos, se reza por la paz y la fraternidad. 

“Nos encontramos en una situación delicada y de gran contradicción. En el lenguaje se ‘verbaliza’ paz, en las actitudes y gestos se grita violencia. La causa es la pretensión de maquillar la realidad, usar una máscara de diálogo para ocultar la intolerancia. Se respira intransigencia en un aire enrarecido”, advirtió.

“Parafraseando el título de la Colecta, te invito a rezar y pedir ‘más ternura por menos agresión’, ‘más diálogo por menos soberbia’, ‘más amor por menos indiferencia’, ‘más equidad por menos exclusión’. El hambre es violencia; tengamos en cuenta a quienes más sufren esta agresión”, concluyó.+