Jueves 21 de noviembre de 2024

Mons. Canecín llamó a "ser protagonistas y responder con fraternidad"

  • 5 de febrero, 2021
  • Goya (Corrientes) (AICA)
Al celebrar el Día Internacional de la Fraternidad Humana, el obispo de Goya presidió una misa en la catedral, animando a la comunidad a comprometerse en el momento actual.
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El obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecín, celebró el jueves 4 de febrero una misa en la catedral Nuestra Señora del Rosario, por el Día Internacional de la Fraternidad Humana.

Haciendo referencia al encuentro virtual organizado por el jeque Mohammed Bin Zayed en Abu Dabi, capital de los Emiratos Árabes Unidos, que contó con la participación del Gran Imán de Al-Azhar, Ahmad Al-Tayyeb y el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, el prelado de Goya afirmó que "vivimos una etapa de la historia inédita".

En este sentido, animó a transitar este momento "de manera activa, siendo protagonistas”, ya que "son grandes, vertiginosas y profundas las transformaciones y los desafíos” de estos tiempos, particularmente por el Covid, aunque aclaró que "no son menos desafiantes todas las otras circunstancias que se viven como familia humana".

Por eso, dijo que “sea cual fuere nuestra raza, lengua o color de piel, nuestra concepción política-partidaria ideológica, antes de todo y por encima de todo eso, tenemos muchas cosas en común”, porque "todos tenemos un mismo origen, venimos de Dios”.

Monseñor Canecín resaltó la naturaleza humana común de todo hombre “desde donde brota nuestra dignidad de personas, que según nuestra fe cristiana es a imagen y semejanza de Dios. Todos tenemos el mismo y único destino hacia el cual caminamos y es esto lo que nos impulsa a reconocernos hermanos".

Por el contrario, el prelado advirtió que "si entramos por el otro camino del no reconocimiento al otro hermano, lo que nos espera es lo que estamos viviendo: la injusticia, la inequidad, la desigualdad, la cultura de la muerte y la cultura del descarte”. Frente a la cultura emergente propuesta por grandes y poderosos intereses económicos, el obispo llamó a responder con la fraternidad.

Asimismo, hizo referencia al Alto Comité para la Fraternidad Humana y, los "compromisos firmes y acciones concretas" que fomenten la "fraternidad, la solidaridad y el respeto y la comprensión mutua", destacando el programa de la creación de una Casa de la Familia Abrahámica, con una sinagoga, una Iglesia y una mezquita, en la isla de Saadiyat, en Abu Dhabi.

“Tenemos que poder vivir cada uno como hermano de todo ser humano", señaló luego y llamó a empezar "en la propia familia, en el barrio, dejando de lado las cosas que son motivo de divisiones, marginación y de discriminación, poniendo énfasis en los motivos que nos unen".

Finalmente, afirmó: "Quien reconoce que Dios es Padre y tiene la experiencia de ser hijo: de esa experiencia filial brota la capacidad de ser hermanos de todos los hombres" y concluyó animando a “buscar el bien común", porque "mientras que un ser humano no viva de acuerdo a su dignidad nunca la humanidad va a encontrar la paz, la armonía".+