Los obispos denuncian que el chavismo, vacuna solamente a los que tienen "afiliación política"
- 2 de junio, 2021
- Caracas (Venezuela) (AICA)
Los prelados reclaman la necesidad de una vacunación masiva frente al colapso sanitario, el aumento de contagios y por ser uno de los peores países en el manejo de la pandemia.
El vicepresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), monseñor Mario Moronta, aseguró que los obispos del país “reclaman la necesidad de una vacunación masiva” frente al colapso sanitario, el aumento de contagios de la covid-19 y por ser uno de los peores países del mundo en el manejo de la pandemia.
“La Conferencia Episcopal y los obispos estamos reclamando la necesidad de una vacunación masiva y recordamos que esto no es un problema político ni de carácter partidista, aunque lamentablemente en eso lo han convertido los grupos que están en el debate político”, denunció monseñor Moronta en una entrevista concedida a Vatican News.
El prelado se refirió al plan de vacunación y lamentó que se encuentren “muy por debajo de la media internacional” y que “según algunas estadísticas estaríamos en el último o en el penúltimo puesto de la lista de países con bajo porcentaje de vacunación”.
Monseñor Maronta afirmó que, tras hablar con uno de los mejores grupos de médicos de Venezuela, estos señalaron que para lograr un alto porcentaje de vacunación para fines de 2021, se necesitaría “en este momento 14 millones de vacunas que implicarían las dos dosis que hay que colocarse por persona”.
“Si el Gobierno tiene un plan para acelerar las vacunaciones, nosotros no lo conocemos” porque “se dedica a hacer anuncios y publicidades pero no conocemos ningún plan en concreto” denunció el prelado.
“Otro de los problemas que tenemos es que en varias regiones se iba a vacunar a médicos y personal de salud pero eso no se ha cumplido: se está vacunando solamente a los que tienen una afiliación política en el grupo del oficialismo y también a personas que quizás no lo requieren con tanta urgencia como otros grupos más vulnerables, como los médicos, los enfermeros, los bomberos, los operadores de salud y las personas mayores” lamentó el vicepresidente.
“Tanto la Iglesia, como otras instancias religiosas y de carácter social han ofrecido sus buenos oficios para colaborar en estas campañas de vacunación, pero hasta ahora, tristemente, lo que tenemos son solo anuncios. En definitiva, 1 millón 300 mil vacunas, vengan de donde vengan, no llegan a cubrir ni siquiera una quinta parte de lo que se requiere en el país”, lamentó.
“El número de contagiados es tan grande que hay una crisis de camas en los hospitales, es decir, no se consiguen fácilmente puestos para ser atendido en los hospitales públicos. Tampoco es asequible acudir a las clínicas privadas ya que, a causa de la devaluación de la moneda nacional, los precios resultan muy onerosos o excesivamente caros”, continuó.
También lamentó que su pueblo está “palpando y sufriendo con la covid-19 la expresión de una crisis que viene desde hace ya muchos años con el deterioro del sistema de salud”.
Finalmente, el vicepresidente de la CEV aseguró que los obispos “aprendieron que el Evangelio se predica, no solo desde los púlpitos y altares sino en medio de la gente. Por tanto, la primera voz de la Iglesia en esta situación de injusticia social es de cercanía, acompañamiento y solidaridad, haciendo que la voz de estas personas que sufren sea escuchada, aunque ello comporte a veces recibir críticas”, concluyó. +