Homenaje a San Juan Pablo II en Buenos Aires
- 4 de enero, 2023
- Buenos Aires (AICA)
La comunidad polaca honró a San Juan Pablo II en el monumento al papa polaco en la Biblioteca Nacional. Participó la embajadora de Polonia, Aleksandra Maria Piatkowska.
La comunidad polaca honró a San Juan Pablo II en un acto realizado el 5 de diciembre ante el monumento al pontífice polaco en los jardines de la Biblioteca Nacional, en la plaza delimitada por la avenida del Libertador y las calles Agüero y Austria, en la ciudad de Buenos Aires.
La embajadora de la República de Polonia, Aleksandra Maria Piatkowska, y el ministro plenipotenciario encargado de los asuntos de la colectividad polaca en el extranjero, Jan Dziedziczak, colocaron una ofrenda de flores al pie de ese monumento a San Juan Pablo II, que había sido bendecido el 6 de agosto de 1999 por el entonces nuncio apostólico monseñor Ubaldo Calabresi.
Los sacerdotes franciscanos polacos Olaf Kazimierz Bochnak OFM, director de la Misión Católica Polaca en la Argentina, y Jorge Jacek Twarog OFM, capellán de los polacos, dirigieron una oración en ese acto en el que se recordaron algunos hechos destacados de la vida y obra de Karol Józef Wojtyla, en su camino a la santidad.
El padre Bochnak dio comienzo a la emotiva ceremonia. Hablando en el idioma polaco, destacó el invalorable legado del inolvidable pontífice que fue elegido sucesor de Pedro el 16 de Octubre de 1978. Recordó sus palabras al iniciarse su pontificado: “¡No temáis! Abrid de par en par las puertas a Cristo!”.
E impartiendo luego una bendición especial, pidió que todo ser humano de todas las razas y culturas, tutele siempre la paz, recordando la exhortación del pontífice polaco en la XXXVI Jornada Mundial de la Paz, el 1 de enero de 2003: “Pacem in terris, una tarea permanente”.
En ese mensaje San Juan Pablo II recordaba, cuarenta años después, la encíclica Pacem in terris, en la que dos meses antes de morir San Juan XXIII se dirigió a “a todos los hombres de buena voluntad”. En esa encíclica el papa Roncalli afirmó que “la paz en la tierra, suprema aspiración de toda la humanidad a través de la historia, es indudable que no puede establecerse ni consolidarse si no se respeta fielmente el orden establecido por Dios”.
Conviene tener en cuenta que los papas Juan XXIII y Juan Pablo II fueron proclamados santos el mismo día, 27 de abril de 2014, por el papa Francisco.
Después, el señor Dziedziczak, como plenipotenciario del gobierno de Polonia para la diáspora polaca, expresó, emocionado, en un breve y cálido discurso su agradecimiento por tan extraordinario día compartido en la fe y subrayó la importancia del encuentro en memoria del papa polaco, quien no se cansó nunca de vivir animado por el coraje indómito de la fe, difundiendo la palabra de Dios.
La ceremonia concluyó con aplausos y vítores. Al final se distribuyeron entre los presentes estampas de San Juan Pablo II, para rezar y para que las llevaran a sus familias y amigos.
Participaron del homenaje otros diplomáticos y funcionarios del gobierno polaco, así como representantes de asociaciones de la comunidad polaca en la Argentina: por la Asociación de Excombatiente Polacos (SPK), los Hijos de los Héroes Combatientes Polacos durante la Segunda Guerra Mundial; el presidente de la Asociación Cultural Argentino Polaca (ACAP), Juan José Okecki; el presidente de la Asociación Polaca Pilsudski en Buenos Aires, Alejandro Gustavo Szejner, brigadier de Fuerza Aérea Argentina; la presidenta de la entidad Ognisko Polskie, Krystyna Wardyga, acompañada por su esposo, Miguel Ferrari.
También concurrieron amigos y conocidos de otras nacionalidades, que compartieron esta manifestación de alegría cristiana. Una de las asistentes comentó que sigue resonando el canto que entonamos al papa de la civilización del amor, un santo en vida, peregrino del mundo: “Juan Pablo II, te quiere todo el mundo”.+