El Papa celebrará su santo aplicando la segunda dosis de la vacuna a 600 pobres de Roma

En la fiesta de San Jorge "además de recibir la vacuna, la gente participará en la fiesta por el onomástico del Santo Padre, "con una sorpresa ofrecida al Papa", informó hoy la Limosnería Apostólica.

En la fiesta de San Jorge, el viernes 23 de abril, el grupo de 600 pobres que recibieron la primera dosis, regresarán al Vaticano para el retiro planificado de la segunda dosis de la vacuna contra el Covid. Mañana el refuerzo con la segunda dosis, se administrará en el Aula Pablo VI, donde se instaló el centro de vacunación del Vaticano. 

"Además de recibir la vacuna, la gente participará en la fiesta por el onomástico del Santo Padre -dice un comunicado de la Limosnería Apostólica- con una sorpresa ofrecida al Papa".

El "hermoso signo" del Papa en el día de su onomástico
“Como en años anteriores -explica el Limosnero del Papa, cardenal Konrad Krajewski- Francisco decidió dar y no recibir algo, al más puro estilo evangélico”. 

En 2020, el pontífice envió respiradores a Rumania, un país particularmente en problemas debido a la pandemia. En años anteriores había entregado seis mil coronas de rosario realizadas para la Jornada Mundial de la Juventud en Panamá a los jóvenes de la arquidiócesis de Milán y un huevo de chocolate de 20 kg a los pobres en el comedor Caritas de la estación Termini de Roma.

El Papa entre los sin techo vacunados en el Aula Pablo VI
La vacunación de hombres y mujeres mayores de 60 años, con graves problemas físicos y dificultades para acceder a los establecimientos de salud nacionales, se remonta a fines de enero. 

Luego la campaña se reanudó también durante la Semana Santa con la primera vacunación de los más vulnerables: algunos invitados de los dormitorios gestionados por las Hermanas de la Madre Teresa, otros asistidos por la Comunidad de San Egidio y también por Medicina Solidale que gestiona la “Madre di Misericordia”, bajo la columnata de San Pedro. 

La iniciativa de la Limosnería Apostólica, con la vacuna ofrecida a 1400 personas, "una gota de amor" según el cardenal Krajewski, tenía como objetivo dar seguimiento a los llamamientos del papa Francisco para que nadie fuera excluido.+