EE.UU.: Los padres no quieren ideología de género en las escuelas

Una encuesta de Parents Defending Education (PDE), reveló que las tres cuartas partes de los padres -de diferentes ideologías políticas y religiosas- se oponen a las políticas escolares transgénero.

La gran mayoría de los padres estadounidenses, incluidos la mayoría de los padres católicos, están en contra de las políticas escolares que imponen una ideología de género al permitir que los varones biológicos estén en los espacios reservados a las niñas y al ocultar información sobre la identidad de género de un niño a sus padres, según una encuesta publicada esta semana.

Una encuesta a 1.000 padres en todo el país, encargada por el grupo sin fines de lucro Parents Defending Education (PDE), encontró que más de tres cuartas partes de los padres de todas las líneas ideológicas y políticas se oponen a las políticas escolares que permiten a los varones biológicos que se identifican como niñas transgénero participar en equipos deportivos femeninos o acceder a baños y vestuarios femeninos.

Casi tres cuartas partes de los padres católicos encuestados también se oponen a que los varones biológicos participen en los equipos deportivos de niñas y casi el 60% se opone a que los varones biológicos utilicen los vestuarios y los baños de las niñas, lo que fue ligeramente inferior a la población general encuestada.

La encuesta reveló que aproximadamente tres cuartas partes de los padres se oponen a las políticas escolares que alientan o exigen que los maestros, consejeros, enfermeras escolares y entrenadores oculten a los padres la información sobre la identidad de género de un niño en determinadas circunstancias si este comienza a identificarse como transgénero. Esto incluye a casi tres cuartas partes de los padres católicos.

Estas políticas a menudo impiden que los funcionarios notifiquen a los padres que su hijo se identifica como transgénero sin obtener primero el consentimiento expreso del niño.

Según la encuesta, aproximadamente el 90% de los padres quieren que las escuelas se centren en materias básicas como matemáticas, lectura, escritura, ciencias y estudios sociales. Un poco más de la mitad de los padres quieren reducir la influencia del Departamento de Educación de los Estados Unidos y un poco menos de la mitad de los padres creen que el departamento está utilizando adecuadamente los recursos para promover la educación de los estudiantes.

"Estos resultados resaltan que los padres están insatisfechos con una serie de elementos del sistema educativo estadounidense moderno y que existe un amplio consenso de que es hora de que las escuelas vuelvan a lo básico", dijo la presidenta del PDE, Nicole Neily, madre de dos niños en edad escolar, en un comunicado.

"Durante demasiado tiempo, los burócratas federales han sacrificado las necesidades de los estudiantes y las familias para apaciguar las insaciables demandas de dinero y poder de los sindicatos y activistas", añadió Neily.

Desconexión entre políticos, funcionarios escolares y padres
La encuesta encontró una oposición bipartidista entre los padres a que las escuelas impongan la ideología de género a través de estas políticas. Sin embargo, la unidad entre los padres no ha llevado a un acuerdo bipartidista dentro del gobierno federal, los gobiernos estatales o las juntas escolares locales.

Según la encuesta, el 86% de los padres republicanos, el 80% de los padres políticamente independientes y el 60% de los padres demócratas se oponen a que los varones biológicos participen en los deportes femeninos. También se descubrió que el 92% de los republicanos, el 75% de los independientes y el 58% de los demócratas se oponen a que se permita la presencia de varones biológicos en los baños y vestuarios femeninos.

Alrededor del 88% de los padres republicanos, el 72% de los padres independientes y el 58% de los padres demócratas también se oponen a las políticas escolares que alientan o requieren que los maestros, enfermeras, entrenadores y otros funcionarios escolares oculten información a los padres si su hijo se identifica con un género que es incompatible con su sexo biológico.

A pesar del acuerdo bipartidista entre los padres, aproximadamente la mitad de los estados del país permiten que los varones biológicos participen en competencias deportivas femeninas y accedan a vestuarios, baños, dormitorios y otros espacios privados femeninos cuando esos varones se identifican como niñas transgénero. Estas políticas existen en estados gobernados mayoritariamente por legisladores demócratas.

Al 30 de octubre de 2024, el PDE también encontró que al menos 1,143 distritos escolares, que operan casi 21,000 escuelas y atienden a más de 12,2 millones de niños, tienen políticas que alientan o requieren que los funcionarios escolares oculten información a los padres en determinadas circunstancias si su hijo comienza a identificarse con un género incompatible con su sexo. 

La lista está incompleta, pero el PDE alienta a los padres a informar esas políticas a su organización para las escuelas que no están en la lista.

En abril de 2023, California se convirtió en el primer estado en imponer una ley que obliga a los maestros y otros funcionarios escolares a ocultar la identidad transgénero autodenominada de un niño a sus padres en determinadas circunstancias, lo que ha provocado demandas que cuestionan la política.

A nivel federal, el Departamento de Educación de la administración de Joe Biden revisó las normas del Título IX para redefinir la discriminación sexual y aplicarla a la "identidad de género" autoafirmada de una persona en escuelas, universidades y otras instituciones educativas. La aplicación de esta política fue bloqueada por los jueces de 26 estados después de que funcionarios estatales republicanos presentaran demandas advirtiendo que el lenguaje invalidaría sus políticas que separan los deportes, los baños y los vestuarios en función del sexo biológico.

Neily dijo que los distritos escolares a menudo imponen la política de ocultar información a los padres "con el pretexto de la seguridad" cuando los funcionarios creen que los padres no apoyarán la identidad transgénero autoafirmada del niño. Sin embargo, aseguró que los empleados de la escuela ya son informantes obligatorios y están obligados a notificar a los Servicios de Protección Infantil (CPS) si creen que un niño está en peligro, lo que luego puede ser investigado por los CPS. 

La política de ocultar información a los padres, dijo, permite a los funcionarios escolares tomar una "decisión unilateral" de que los padres no están seguros. Expresó su preocupación por "ese tipo de juicios apresurados".

Según la presidenta de PDE, una de las razones de la desconexión entre los funcionarios y los padres es que "muchos padres no son conscientes de que estas políticas están vigentes" y algunos padres "no tienen el tiempo, la capacidad o los medios para siquiera saber cómo hacer este tipo de preguntas".+