"El soplo del Espíritu, la Iglesia y el mundo de hoy", fue el tema de la 37ª reunión ecuménica de los obispos amigos de los Focolares que tuvo lugar en Sigtuna (Suecia) del 6 al 9 de noviembre. Los 40 obispos participantes, de 12 iglesias cristianas de 18 países reflexionaron sobre la escucha del Espíritu frente a los desafíos ecuménicos y contemporáneos.
Durante el vuelo de regreso de Malmö a Roma, al término de su visita apostólica a Suecia, el papa Francisco se encontró con los periodistas que viajaban a bordo del avión y mantuvo una rueda de prensa de unos cuarenta minutos. El pontífice contestó las preguntas de los periodistas y se refirió al tema de los refugiados, al sacerdocio femenino, el diálogo interreligioso y la situación en Venezuela, entre otros.
"Doy gracias a Dios por haberme dado la oportunidad de venir a esta tierra y encontrarme con ustedes", dijo el papa Francisco a la multitud de fieles congregados en el estadio Swedbak de la ciudad sueca de Malmö, finalizada la celebración eucarística con la que concluyó su visita a ese país. En sus palabras, antes del rezo de la oración mariana del Ángelus, el pontífice los animó "a vivir su fe en la oración, en los Sacramentos y en el servicio generoso ante quien tiene necesidad y sufre".
El papa Francisco presidió hoy, en la festividad de Todos los Santos, una misa en el estadio Swedbak de Malmö, Suecia, en el segundo y último día de su visita a Suecia. Ante los miles de católicos que participaron de la Eucaristía el Santo Padre recordó durante su homilía que "si hay algo que caracteriza a los santos es que son felices". "Encontraron el secreto de esa felicidad auténtica, que anida en el fondo del alma y que tiene su fuente en el amor de Dios. Por eso, a los santos se los llama bienaventurados. Las bienaventuranzas son su camino, su meta, su patria".