La procesión y la misa se centraron en el pedido especial por el don de la lluvia, en un momento en que la provincia enfrenta varios focos de incendio. El Card. Ángel Rossi presidió la misa central.
La basílica de Nuestra Señora de la Merced, en la capital provincial, se vistió de fiesta para celebrar a María, la Redentora de Cautivos y Especial protectora de la Argentina.
Llamó a movilizarse para ayudar y pidió agua potable, zapatillas, mercadería no perecedera y dinero para las urgencias. El Card. Rossi destaca la labor de los bomberos y su defensa de la vida.
El arzobispo de Córdoba destacó que, "cuando los más pequeños son recibidos, amados, custodiados, tutelados, la familia está sana, la sociedad mejora, el mundo es más humano".