Dedicó su vida al servicio como religiosa, profesora y secretaria en la Congregación de las Hermanas Teresianas. En 2018, recibió la bendición apostólica del papa Francisco.
Con 116 años, la hermana Inah Canabarro, es la última persona conocida nacida en 1908, según confirmó LongeviQuest, una organización dedicada a rastrear y validar la longevidad en todo el mundo.