"El diálogo interreligioso tiene un papel único en la construcción de un futuro de reconciliación, justicia y paz", dijo ante una delegación encabezada por Dede Edmond Brahimaj, líder de los bektashi.
El presidente de la Federación Asiática de Conferencias Episcopales hizo un llamamiento para que se profundice en el compromiso de la Iglesia con la no violencia.