El obispo de Goya, monseñor Adolfo Canecín, envió a la comunidad una carta pastoral con motivo de los 60 años de la creación de la diócesis, y anunció el inicio del Año Jubilar Diocesano.
La diócesis de Oberá celebró este jueves 13 de junio, día de San Antonio de Padua, sus fiestas patronales y el décimo aniversario de la jurisdicción eclesiástica, creada por el papa Benedicto XVI el 13 de junio de 2009. El cardenal Mario A. Poli, arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, presidió la misa central, acompañando al obispo diocesano, monseñor Damián Santiago Bitar.
El obispo de Merlo-Moreno, monseñor Fernando Maletti, dio gracias a Dios y a la comunidad diocesana por "el carisma misionero que alegra nuestra vida", pidió al Señor poder crecer "en el fervor en un anuncio lleno de confianza" y llamó a ser "una Iglesia que entre en cada hogar reavivando en las familias la sed de Dios. Una gran comunidad/familia que tenga la capacidad de escuchar con atención y amabilidad, y de hablar con respeto y prudencia para que, a través de nuestra presencia, se reconozca el amor y la comprensión a través de una Iglesia maternal y cercana".
El 10 de abril de 1961 el papa Juan XXIII erigió la diócesis de Río Gallegos que comprende todo el territorio de las provincias de Santa Cruz y Tierra del Fuego, con una superficie total de 265.514 kilómetros cuadrados, la más extensa de la Argentina y la más austral del mundo. Con motivo de cumplirse los 55 años de su creación, el obispo de Río Gallegos, junto con el Consejo Diocesano de Pastoral y el Consejo Presbiteral, envió a la comunidad diocesana una declaración titulada "55 años de la creación de la Diócesis de Río Gallegos, Iglesia viva que anuncia a Cristo Resucitado".