San Pedro fue constituido por Jesucristo como Supremo Pastor de la Iglesia, y la sede romana fue designada Cabeza y Maestra de todas las Iglesias del mundo. Para solemnizar este hecho trascendental, y para venerar perpetuamente tanto al "Primado" de la Iglesia universal como la "Cátedra de Roma", se estableció esta fiesta en la que se celebra la toma de posesión del apóstol San Pedro de la sede episcopal de Roma, como vicario de Cristo en la tierra. Hoy es, pues, la fiesta de la institución del primado del Papa, es decir propiamente la "fiesta del Papa", y la "fiesta de la Sede Apostólica".