Sábado 20 de abril de 2024

Mons. Ojea expone las propuestas del Papa para la fraternidad y la amistad social

  • 3 de noviembre, 2020
  • San Isidro (Buenos Aires) (AICA)
El presidente de la CEA profundizó sobre los tres ejes transversales de la nueva encíclica Fratelli tutti, del papa Francisco, en una entrevista con Canal Orbe 21.
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El obispo de San Isidro y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), monseñor Oscar Vicente Ojea, profundizó sobre los tres ejes transversales de la nueva encíclica Fratelli tutti, del papa Francisco: el amor universal, la dignidad humana y el destino social de los bienes.

En una entrevista con Canal Orbe 21, puntualizó que el primero de los medios que propone el pontífice para mirar estas dimensiones de la fraternidad universal y de la amistad social en la pospandemia, es “un cambio del corazón, para poder realizar un cambio cultural profundo”.

“Por esto es una situación que nos va a obligar a iniciar procesos, pacientemente. Los resultados no se van a ver, pero el Papa nos invita a soñar juntos”, destacó, y aclaró: “No en un sentido utópico, sino a poder construir un proyecto real de fraternidad humana”.

“No es imposible. Él piensa que en esta situación, en medio de la pandemia, tenemos la oportunidad, que son las oportunidades que da la crisis. Por eso hace falta “un cambio profundo del corazón, un cambio de mentalidad, acompañado de una pedagogía de la solidaridad y  de una pedagogía de la fraternidad”.

El prelado indicó que el Papa se dirige especialmente a los jóvenes y les dice: “No se dejen engañar por el desprecio al migrante; no se dejen engañar por creer que el otro viene de otro lado, o de otra cultura, o porque ha vivido otras condiciones de vida, ya es un peligro y hay que sospechar, hay que poner muros, hay que establecer distancias”.

“No caigan en ese engaño, porque, en realidad, están perdiendo una oportunidad de intercambio, de enriquecimiento y de crecimiento”, sostuvo.

El obispo sanisidrense señaló como un segundo punto el tema de la virtud de la amabilidad, por eso el Papa habla muchas veces de la importancia de la sonrisa. “¡Qué importante es alentar! ¡Qué importante es crear espacios de escucha!, aún en medio de conflictos, de tormentas, de enormes dificultades. ¡Qué importantes son las personas que tienen este don, esta virtud!”

Tras referirse a las guerras y a la pena de muerte, pone el énfasis en el principio de la dignidad de la persona, más allá de lo que haya hecho, más allá de su educación, más allá de sus condiciones de vida”.

Monseñor Ojea afirma que otro medio importante es el “fortalecimiento” de las Naciones Unidas, por lo que el pontífice sueña con que esa organización pueda fortalecer a las naciones, para que “puedan respaldar los acuerdos multilaterales y puedan oponerse a ciertas exigencias de las empresas multinacionales, que son en definitiva quienes están llevando y gobernando, poniendo las pautas culturales del mundo en que vivimos”.

El prelado expresó que en la encíclica Francisco manifiesta una “preocupación muy grande y un dolor muy grande por el modo de uso de las redes, que terminan con la intimidad de las personas, que pueden descalificar continuamente sobre ellas, sin ningún control”. 

“Esto nos deja desguarnecidos frente a una cultura que busca dividir, para crear más consumidores. Esta táctica invisible es denunciada por el Papa como algo que denigra la persona y no permite las defensas naturales que tiene un pueblo cuando tiene una pertenencia firme, cuando tiene valores firmes, para resistir a este tipo de ataques que vacían la persona”, concluyó.+

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