La CLAR anima a promover el liderazgo de las mujeres en el cuerpo eclesial
- 9 de marzo, 2022
- Bogotá (Colombia) (AICA)
La Confederación Latinoamericana y Caribeña de Religiosos y Religiosas alienta a las consagradas a seguir "con su misión sostenidas con su valentía, su oración, su creatividad y su persistencia".
La Confederación Latinoamericana y Caribeña de Religiosos y Religiosas (CLAR) difundió un mensaje a las mujeres con motivo del 8M, en el que anima a ir hacia un modo nuevo de ser Iglesia, a fin de “promover y formar nuevos liderazgos, especialmente de la mujer y de las laicas como ciudadanas en pleno del cuerpo eclesial”.
“Atentos a la invitación que nos hace María, la reconocemos como mujer, discípula y profetisa. Su voz nos moviliza a la profecía, que implica escuchar con el oído atento, para pasar por el corazón palabras, historias, acontecimientos y la vida que se teje, cuando se hace el camino con el pueblo”, ejemplifica.
“Nos dispone a estar más cerca, a sentirnos serenamente más próximos a toda forma de vida en su belleza, en su dolor y en su complejidad. Nos obliga a informarnos con la lucidez y el sentido crítico de quien sabe que las verdaderas primicias se tejen en las plazas y en las cocinas, en los parques y las escuelas, en los campos, y a la salida de los templo”, agrega.
Asimismo, agradece “a Dios por cada una de las mujeres empeñadas en construir una sociedad más humana y acogedora. Como lo manifestó el papa Francisco a los obispos de Latinoamérica, en su visita a Colombia en 2017: '¡La esperanza en América Latina tiene un rostro femenino!'".
Por otra parte, la CLAR anima a las mujeres consagradas a seguir “adelante con su misión sostenidas con su valentía, su oración, su creatividad y su persistencia encontrarán las nuevas respuestas frente a los desafíos del tiempo actual”.
“No tiene tregua la urgencia de trabajar y hacer incidencia con los pobres, con los marginados, con todos los que están esclavizados… en medio de los pueblos indígenas, junto a los niños en situación de calle, en los pueblos donde faltan alimentos y medicamentos”, expresa.
“Son presencia de los signos del Reino de Dios las mujeres que viviendo contracorriente dan testimonio de la buena nueva del Evangelio por los caminos sinodales de la escucha, el discernimiento y la apertura para la transformación de estructuras eclesiales y sociales”, concluye.
Más información en www.clar.org.+