Fue en el Parque Metropolitano de Maipú y participaron unos 10.000 devotos. Presidió la misa el obispo auxiliar, Marcelo Mazzitelli, quien en homilía recordó que la sinodalidad nos compromete a todos.
El obispo de Quilmes presidió la misa por la fiesta de la patrona diocesana, la inmaculada Virgen María, a quien "le confiamos nuestro camino sinodal, para poder llevar la alegría del Evangelio con el
Fue en el santuario del barrio porteño de Villa Luro, donde el cardenal Mario Poli le rogó al santo, hombre de esperanza, "por la patria que soñamos, por un destino más digno para todos".