El cardenal Santos Abril y Castelló sufrió ayer una descompensación mientras desarrolla una visita apostólica a la diócesis de Ciudad del Este, enviado por el papa Francisco a fin de interiorizarse sobre la situación pastoral de la jurisdicción eclesiástica que pastorea monseñor Rogelio Livieres, la situación de los seminarios locales y las acusaciones levantadas contra un sacerdote por presunto abuso sexual. El pontífice se comunicó "personalmente" con el purpurado para interiorizarse sobre su salud. Tras estar internado unas horas, fue dado de alta y retomó sus actividades. "Me alegro de poder estar con ustedes. Para que no se preocupen, me bajó un poco la presión y nada más. Por eso quise estar con ustedes esta noche, porque sé que muchos quieren ver al cardenal", dijo en la catedral San Blas, donde habló a los fieles durante una misa.
La oficina de prensa del Vaticano informó que los miembros de la Comisión Cardenalicia del Instituto para las Obras de Religión (IOR) nombró presidente al cardenal español Santos Abril y Castelló.