El arzobispo de Buenos Aires, monseñor Mario Poli, participó invitado junto con dignatarios y fieles de distintas confesiones en una comida de ruptura del ayuno (iftar) por el comienzo del mes de Ramadán, sagrado para los musulmanes. La reunión se realizó en el Palacio Aberg Cobo y fue organizada por el Centro de Diálogo Intercultural Alba y la Dirección General de Cultos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Invitado a decir unas palabras, el prelado habló de promover una "sagrada convivencia", en la que todos puedan crecer, alabar, dar a conocer al único Dios verdadero, clemente y misericordioso, compasivo, "Dios que es nuestro Padre, es nuestro amor". Y concluyó: "Dios los bendiga".