Se trata de la que se presenta como "parroquia del Buen Pastor" en Victoria. Advierten que el grupo Sacerdotes Obreros Misioneros "no está en comunión con la Iglesia" ni pueden celebrar sacramentos.
La entidad argentina reclamó al gobierno nicaragüense el cese de la persecución y que garantice la libertad de prédica y la realización de los actos públicos propios de toda confesión religiosa.