El papa Francisco abogó por más "libertad" en el modo de enseñar teología en las escuelas, planteó la necesidad de una "teología en solidaridad con los náufragos de la historia" y animó a educar a los jóvenes en el diálogo con judíos y musulmanes. Lo hizo en Nápoles, al clausurar un encuentro en la Pontificia Facultad Teológica de Italia Meridional.