Mons. Zurbriggen: 'Con la alegría de Cristo, al corazón del hermano'
- 7 de marzo, 2025
- Concordia (Entre Ríos) (AICA)
El obispo de Concordia invita a vivir intensamente la Cuaresma y exhorta a la comunidad a caminar juntos, renovando el compromiso de ser una Iglesia viva, sanadora y en comunión.

En una carta dirigida a los fieles de Concordia, el obispo local, monseñor Gustavo Zurbriggen, invita a toda la comunidad a comenzar este tiempo de Cuaresma con un renovado compromiso de oración, penitencia y limosna, siguiendo las enseñanzas del Evangelio (Mt 6,1-8.16-18).
Según el prelado, la Cuaresma es un tiempo litúrgico para prepararse a celebrar la Pascua, el acontecimiento central de la fe cristiana: la muerte y resurrección de Jesucristo.
Además de la reflexión sobre la Cuaresma, monseñor Zurbriggen compartió con los fieles el lema pastoral de la diócesis para los años 2025-2028: "¡Es ahora! Con la alegría de Cristo, al corazón del hermano", un lema surgido de las Asambleas del Pueblo de Dios celebradas a finales de 2023. Este lema invita a una evangelización dinámica, urgente y llena de alegría, para llevar la Buena Nueva a todos los rincones de la comunidad.
Monseñor Zurbriggen enfatiza en su carta la importancia de una evangelización alegre y cercana, recordando las palabras del Papa Francisco, quien anima a la Iglesia a anunciar el Evangelio sin miedo, con una cercanía que pueda llegar al corazón de cada hermano. Según el obispo, para poder evangelizar de manera efectiva, es necesario primero vivir la experiencia del amor de Cristo en el corazón, lo que permitirá transmitir con autenticidad y alegría el mensaje del Evangelio.
En la carta, también se presentan las tres metas pastorales que guiarán el trabajo de la diócesis durante los próximos años. En primer lugar, afianzar el acompañamiento y revitalizar todos los sectores parroquiales. Esta meta responde al clamor de la comunidad por ser escuchada y acompañada en su caminar. Así, se busca fortalecer la participación activa en las parroquias y en todos los sectores de la Iglesia, promoviendo una espiritualidad renovada, la participación y la misión.
También se insta a transformar las propias actitudes, a la manera de Jesús, para llevar la Buena Nueva a las distintas realidades. El objetivo es una conversión profunda, tanto personal como comunitaria, para ser auténticos discípulos de Cristo. Para ello, se invita a una reflexión sobre el estilo pastoral de Jesús, un modelo de cercanía, compasión y apertura al encuentro con los demás.
Por último, la meta es favorecer y acompañar la participación activa de los jóvenes. Reconociendo la importancia de la juventud en la Iglesia, esta meta busca darles un espacio real de participación, para que puedan experimentar la vida plena que Cristo nos regala. Se los anima a ser protagonistas activos en la misión evangelizadora.
Monseñor Zurbriggen también resaltó la necesidad de escuchar y comprender las realidades culturales y sociales de hoy, especialmente de las nuevas generaciones, para que el mensaje del Evangelio sea eficaz y llegue a todos, sin exclusiones.
El obispo de Concordia concluyó su mensaje con una invitación a seguir el ejemplo de María, discípula y misionera, para vivir con fervor la misión evangelizadora, recordando que la urgencia de la misión es ahora, con la alegría de Cristo y al corazón del hermano.+